Cada mañana nacemos de nuevo. Lo que hacemos hoy es lo que más importa, –decía Buda hace mucho y yo lo cito para sonar más interesante ;)
Pero ya en serio, ¿No amas el olor del café por las mañanas?
Las mañanas son comienzos nuevos y cuando el sol apenas se está asomando por la ventana, el olor de nuestro café nos sabe a deliciosas posibilidades.
Te cuento que este 28 de septiembre nuestra tienda Mandal signature también se viste de mañana y huele a posibilidades y a nuevos caminos.
¡Sean bienvenidos a la experiencia Mandal signature!, donde nos esforzamos por llevar un café de alta especialidad hasta tu taza, un comercio justo a lo largo de la cadena hasta tu espresso, y una historia de trabajo por parte de personas reales hasta tu americano.
Y como por aquí andamos de comienzos con el pie derecho, el ambiente hoy huele a un aroma mañanero de café oaxaqueño con notas a ciruela, chocolate y mandarina. –sospecho que ya se te está empezando a hacer agua la boca, pero espera, que viene lo mejor.
El café Miramar sabe a lazos familiares y a trabajo honesto.
Al darle el primer sorbo te puedes transportar a los bosques subtropicales de Santa María Yucuhiti, Tlaxiaco, en la región mixteca del estado de Oaxaca.
Si pruebas un poco más, podrás adentrarte en la historia de David García.
Un universitario que con solo 21 años, decidió llevar el café de la familia a otro nivel.
Él y su familia, están tan comprometidos con el medio ambiente, que solo utilizan abonos orgánicos para coadyuvar a la conservación del suelo.
Mientras saboreas tu café, podrás usar tu imaginación –vamos, suéltate un poco-, para escuchar hablar a David en la cocina de su abuela frente a un humeante café y un panqué de miel recién horneado por su abuela:
“Durante muchos años hasta la actualidad el precio del café seguía estando muy bajo, la utilidad que se obtenía gracias a este noble trabajo era escasa, era muy complejo cubrir los gastos para el mantenimiento de nuestras fincas” –te dice David antes de dar un sorbo.
Pero, ¿sabes qué es lo más increíble? que en la taza con granos del café Miramar no sólo podrás sentir la historia de David y su familia, sino que también el trabajo de las personas de su comunidad que son capacitadas por la familia García, quienes apoyan a las minihuertas de la zona para que mejoren la calidad de sus cosechas y les enseñan a luchar por un precio justo. ¿A que no sabe aún más delicioso, ahora que conoces la historia detrás?
Me encanta que hayas podido usar tu imaginación mientras saboreabas la historia detrás del café Miramar, felicidades, cinco estrellas para ti. Te pondré a prueba con más historias de granos de cafés deliciosos, próximamente.
Pero bueno, como confío en Buda y en la magia de los comienzos, inauguro este blog en el que pretendo acompañarte y llevarte de la mano para disfrutar a tu lado esta experiencia de sabores e historias dentro de cada taza de café.
¡Bienvenido y gracias por leerme!
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atte. Lady Mandaline